Me gustan mucho las cosas pequeñas, ya sean unos pimientos baby o una taza en miniatura. Es por eso que he pensado publicar otra receta con tartaletas, y ya de paso os explico otra manera de hacer las bases y preparar un relleno que sabe a Ferrero Rocher.

La primera vez que hice esta tarta fue hace un año, cuando estaba haciendo el Servicio de Voluntariado Europeo en Preston, en el noroeste de Inglaterra. Era el cumpleaños de Laura Bailey, una compañera que trabajaba en la misma organización, y me dibujó una carta muy mona pidiéndome que le hiciera una tarta para su cumpleaños. Mi amiga Natalia tuvo la idea de hacer dos tartas y una de ellas era esta tartaleta, inspirada en la Caramel and Hazelnut Tart de Marks & Spencer. Así que un día la compramos para hacer una cata y saber qué ingredientes llevaba, porque recuerda muchísimo al sabor de un Ferrero Rocher, y descubrimos que era la nutella lo que le daba ese sabor particular. Así que ¡manos a la obra! Todos los que probaron la tarta quedaron encantados y hasta pidieron la receta, por eso quiero compartirla, porque sé que vais a repetir. Esta vez he hecho un pequeño paso a paso del montaje de los rellenos para que os resulte más fácil.
La receta os dará para hacer 8 tartaletas en moldes de tartaletas de 8,5cm, o si preferís hacer solo una grande os dará para un molde de 26 cm.
Tartaletas de Avellana y Toffee
Plato: Tartaletas, TartasDificultad: Fácil8
unidades1
hora30
minutosIngredientes
- Para la base
125 gr harina floja tamizada
125 gr almendras molidas
150 gr mantequilla fría en dados
70 gr azúcar
2 yemas de huevo L
- Para el toffee
100 gr mantequilla
150 gr azúcar moreno (mejor molida o muy fina)
150 ml nata 35% grasa
- Para el relleno de nutella
300 gr nutella
150 ml nata 35% grasa
- Para el topping
150 gr avellanas picadas
Elaboración
- Para la base, mezclamos en un bol la mantequilla en dados junto con el azúcar hasta que blanquee, después le añadimos las yemas de huevo a temperatura ambiente, para que no se corte la mezcla por el cambio de temperatura.
- Por último, se tamiza la harina con la almendra molida y se lo añadimos a la mezcla anterior.
- Mezclamos todo con las manos, sin manipularla demasiado ni amasar, y hacemos un rectángulo o una bola plana, que cubriremos con film transparente para dejar la masa reposar en la nevera durante al menos 30 minutos. Si quieres ver una explicación más detallada échale un vistazo a mi post de tartaletas de lima.
- Ponemos a precalentar el horno a 160-170ºC y preparamos los moldes en caso de que haya que engrasarlos, por eso recomiendo moldes con base desmontable.
- Sacamos la masa de la nevera y la colocamos sobre una superficie sin harina. Lo que suelo hacer es ponerla entre dos papeles de hornear o entre dos láminas de film transparente, así no se pega al rodillo ni a la superficie de trabajo. Le damos unos golpes con el rodillo, estiramos la masa de forma uniforme hasta unos 3-4 mm de grosor y cortamos círculos con un aro que sea más grande que la tartaleta.
- Forramos los moldes con la masa, con cuidado de que esté perfectamente pegada a los laterales y no queden huecos.
- Cortamos el exceso de masa de lo bordes con un cuchillo, pinchamos la base con un tenedor y colocamos papel de hornear encima con garbanzos o algo que haga peso para que no suba la masa mientras se hornea.
- Horneamos durante 8 minutos, les quitamos el peso de encima y horneamos otros 6-8 minutos. Esto depende de cada horno. Una vez que las tartaletas están doraditas las sacamos y dejamos que se enfríen sobre una rejilla antes de desmoldarlas.
- Mientras se enfrían las tartaletas haremos el toffee. Primero ponemos el azúcar en un cazo a fuego medio hasta que se funda, y vamos removiendo con una pala, después añadimos la mantequilla en pomada. Veremos como burbujea al añadirle el resto de ingredientes, es normal, así que le echamos la nata, removemos bien un minuto más y estará listo. Hacer toffee puede llegar a ser una verdadera pesadilla, por lo menos a mi me pasó que un día tuve que repetirlo 4 veces, y, sin embargo, la primera vez que lo hice me salió a la primera. ¿Por qué? Por muchas razones, por ejemplo, que se te cristalice el azúcar, o que la temperatura de los ingredientes no sea la correcta. Así que, ante la duda, debemos tener la mantequilla a temperatura ambiente y la nata caliente, para que no salpique por el cambio de temperatura. También hay que tener cuidado de que no se nos queme el azúcar demasiado porque le daría un sabor amargo. La receta estándar de toffee sería por 100 gr de azúcar blanca, la mitad de mantequilla (50gr) y de nata (50gr), pero la he modificado porque me parecía muy dulce.
- Por otro lado, picamos las avellanas con un cuchillo, tienen que quedar trozos.
- Por último, haremos una especie de ganache de nutella. Calentamos los 150 ml de nata en un cazo y justo antes de que rompa a hervir lo retiramos del fuego y lo vertemos sobre la nutella y mezclamos bien. Esto hará que tenga una textura más suave para verterla sobre la tartaleta.
- Para montar las tartaletas. Primero ponemos una base de avellanas, las cubrimos con el toffee y las dejamos que se enfríen en la nevera unos 30 minutos, para que al verter la nutella encima no se mezclen las capas.
- Una vez tocamos con el dedo y el toffee no está tan blando es cuando podemos echar encima la capa de nutella y decoramos con avellanas por encima. Los protagonistas de esta receta son las avellanas y el toffee, por lo que la capa de nutella es más finita, si no quedaría muy empalagoso.
- Reservamos las tartaletas en la nevera y las sacaremos unos 10 minutos antes de servirlas.
¡Un besito!
Madre miaaaa que bueno tiene que estar esto!!!!! Lo hago en cuanto compre la nata q no tengo en casa!!
Claro que sí! Seguro que repites 🙂