Hace tiempo que quería publicar una entrada sobre la crema de coco, sobretodo porque me parece un buen sustituto a la nata montada tradicional, ya que no contiene lactosa y es un producto vegano. Así que viene muy bien para personas que tienen alergias alimentarias o que siguen una dieta libre de productos de origen animal. Además, me parece la mejor opción frente a “natas vegetales” que llevan un montón de estabilizantes, aromas artificiales y grasas vegetales hidrogenadas.
La marca de leche de coco que suelo comprar es esta que veis en la foto “KATI” y la podéis encontrar en supermercados asiáticos. Me gusta porque solamente lleva agua y 70% de extracto de coco. Para hacer una crema montada necesitáis leche de coco con un mínimo de extracto de coco del 60% y que no lleve (a ser posible) emulsionantes como la goma guar, ya que su función es hacer que no se separen el agua del extracto de coco, pero lo que necesitamos es todo lo contrario. Es decir, necesitamos separar el agua de la parte sólida, ya que es la parte sólida de la leche de coco la que utilizaremos para hacer la crema montada. En los supermercados asiáticos suelen tener varias marcas, si no encontráis leche de coco sin emulsionantes fijaos bien en que tenga un porcentaje alto de extracto de coco. De hecho hay alguna marca que tiene leche de coco para postres, pero suelen llevar algún aditivo.
Si vivís en Madrid hay un supermercado asiático en la calle Leganitos, 33, subiendo desde Plaza de España. Otro que me gusta está junto al centro comercial Príncipe Pío, en la calle Mozart, 5. En Tetuán tenéis también muchas tiendas de productos orientales.
Una vez que tengáis vuestra la lata de leche de coco el primer paso es guardarlo en la nevera para que se enfríe bien, yo suelo dejarla mínimo 2-3 días para asegurarme de que el agua se separa completamente. Ya solamente tenéis que seguir las instrucciones que os doy más abajo para hacer vuestra crema.
Cómo hacer crema de coco montada (vegano)
Plato: BásicasDificultad: Fácil15
minutos2
díasIngredientes
1 lata de leche de coco (sin aditivos y mínimo 60% extracto coco).
1 cda azúcar glace o edulcorante al gusto (opcional)
1/2 cdita extracto o pasta de vainilla
Elaboración
- Guardar la lata en la nevera durante 2-3 días para que se separe el agua de la parte sólida.
- Colocamos en la nevera el bol y las varillas que vayamos a utilizar para montar la crema, para que estén fríos y se monte mejor, especialmente en verano.
- Sacamos la lata de leche de coco de la nevera, la ponemos boca abajo y la abrimos con un abrelatas. Esto lo hacemos porque al guardar la lata en la nevera el agua de coco se habrá separado de la parte sólida, tenemos que quitar ese agua y normalmente se queda en el fondo. Aunque me ha pasado con otras marcas que el agua se quedaba arriba. En cualquier caso vertemos el agua de encima en un bol, para usarlo en otras elaboraciones como batidos, zumos, etc. Nos quedaremos con la parte sólida que verteremos en el bol que tenemos guardado en la nevera.
- Como veis en la foto, tenemos la parte sólida de la leche de coco que queda bastante dura, así que tenemos que batirla con varillas para obtener la textura de crema que queremos. Batimos bien durante un minuto y le añadimos el azúcar glace y la pasta de vainilla. Batimos durante otro minuto más a máxima velocidad hasta que obtengamos una crema.
- Una vez que tengamos la crema de coco montada podemos usarla de inmediato para cubrir una tarta, como relleno o para decorar. Si vamos a usarla en otro momento debemos refrigerarla y darle un poco con unas varillas cuando vayamos a utilizarla de nuevo porque se endurece un poco en la nevera.
Notas
- Podemos guardarla en la nevera en un tupper durante 2-3 días sin que se ponga mala.
Se puede usar como topping para un batido, como hago en esta receta de batido de coco y plátano. Esta crema aguanta muy bien la forma, aún así en verano se os puede fundir, como me estaba pasando mientras hacía las fotos :P. Si tenéis alguna duda dejadme un comentario y os escribo. ¡Besitos!